Los hábitos alimenticios, el sedentarismo y la influencia hormonal favorecen el acúmulo de grasa en determinadas zonas que resultan resistentes a la dieta y el ejercicio una vez que se han establecido.
Estos acúmulos, se distribuyen de forma distinta en hombre y mujeres debido al papel de las hormonas en estos depósitos:
Los depósitos grasos suelen localizarse en cadera y muslos (cartucheras) y con menor frecuencia en flancos (michelines).
El predominio de los depósitos es en el tronco, especialmente abdomen y flancos.
La gran dificultad que presenta la eliminación de estos acúmulos grasos, aún en personas con peso adecuado que siguen una dieta equilibrada y ejercicio, hace que se recurra al tratamiento quirúrgico de los mismos.
La liposucción es la técnica quirúrgica por la que se extraen, mediante cánulas, de forma poco invasiva, la grasa de estas localizaciones. En la lipoescultura, parte de esa grasa puede ser transferida a otras zonas donde se haya producido una pérdida de volumen para devolver el equilibrio y realzar la armonía corporal.
La liposucción no es un tratamiento de la obesidad ni del sobrepeso, por lo que, si este es tu caso, será necesario consultar con un endocrinólogo para bajar de peso con dieta y ejercicio antes de plantear tratamiento quirúrgico.
Los pacientes candidatos a una liposucción son aquellos con acúmulos grasos localizados, un peso adecuado y estable y una buena elasticidad de la piel, para que ésta puede readaptarse tras la cirugía.
Si quieres eliminar esos depósitos rebeldes de grasa y mejorar el contorno de tu cuerpo, no dudes en pedir una consulta y asesoramiento experto e individualizado para saber cómo conseguir el mejor resultado.
En la primera consulta en Cirugía Plástica y Estética Alonso & Godoy, escucharemos tus deseos y expectativas y te aconsejaremos sobre la mejor decisión en cada aspecto, personalizada para ti.
